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MIENTRAS TU DUERMES..YO SIGO NAVEGANDO

¡Qué estrés!!!!;

Ya paso la Navidad, y en un soplo la Nochevieja, si, si, Nochevieja !!!!!ah!!!!!! !!¡Qué estrés!!!!
Yo en Nochevieja me siento… me siento… no sé, me siento como un toro en una plaza, ¿no? Cuando llega la fiesta miro alrededor y me da la sensación de que todo el mundo se lo está pasando bien, menos yo.
El estrés comienza con la cena. Aquello parece una prueba del Gran Prix:
Tienes que llevar ropa interior roja, tener algo de oro para meterlo en la copa, preparar las doce uvas…
y contarlas varias veces, porque, como son todas iguales, te equivocas: Una, dos, tres, cuatro… una, dos, tres, cuatro, cinco, seis…
Esta pocha ya la he contado… Una, dos… siete, ocho…
...oh! ! ! las doce menos veinte!
Y tu madre (gritando): ¿Queréis venir, que todo se esta enfríando?
Que esa es otra; te tienes que comer todo lo que está en la mesa.
¡Antes de las doce! que, con las prisas, más parece que estás en una competencia. Y no eres el único que está agobiado, ¿eh? No hay más que ver la tele.
Que en Tooooodoooooos los canales estan enseñando las mismas pavadas...

    -Cuando la aguja pequeña esté en las doce y la grande también… serán las doce.
¡no vayan a empezar a comerse las uvas, ¿eh?- grita tu mama en medio casi de un colapso nervioso
Vamos a ver: ¿por qué nos explican mil veces que no nos comamos las uvas antes de las 12:00..¡ya lo se!....lo hacemos todos los años...
Cuando por fin llegan las doce...
    -¡GLUP!
    -don…
    -Din-don… -rapiiiidoooo
    -Din-don… -Pfbbbbbbbb…
    -¿qué son qué?
    -Din-don… -tragatelo…
    -Ton… -¡Ahora, ahora!
    -Ton…
    -¡Una!
    -¡Que no, que vamos por la segunda!
    -Ton… -Pues me meto dos…
    -Ton…
    -Seis…
    -¿Cómo que seis?
    -Ton… -A mí ya no me caben más, ¿eh?
    -Ton… -¡Eh!, ¡deja mis uvas!
    -Ton… -¡Es que se me ha caído una al suelo!
    -Ton… -Bgrfds…
    -Ton… -Bggggdffffff…
    -Ton… -A mí ya no me quedan…
    -Ton…- ¡Pues a mí me sobran cuatro!
    -Ton… -mamá el abuelo está morado….
Y cuando acaban, toda la familia con la boca llena de babas, a darse besos:
-Fffffelifsz año, eeeeeeeeeh, felifzcidadef, grfdddfd…
Y suena el teléfono: ¡riiiiiiiiiing!
    -¡Pero coño! ¿Ya están llamando? ¿No se pueden esperar?
    -Pues a mí todavía me sobran dos…
    -¡Champán, que alguien venga a abrir el Champán!

Pero, bueno, vamos a ver ¿a vosotros os parece lógico empezar el año así?
¡Qué estrés, de verdad! Pero como es Nochevieja…tienes la obligación de divertirte.

Así que después te vas a un fiestorro a un sitio en el que, si caben mil personas, el dueño ha decidido meter a cinco mil doscientas.
¡Muy bien! ¡Cuatro mil doscientas más de las que caben!
¡Quédate en la calle si te apetece, con el frio y la lluvia que está cayendo!
Lo bueno que tiene ir a un sitio así es que te puede pasar cualquier cosa. A mí el año pasado me ocurrió de todo....
Yo estaba tan tranquilo, tomándome algo para quitarme el sabor de las malditas uvas, cuando de repente un tío me cogió por detrás y me dijo:

    ¡¡¡COOOOOOOOONGAAAAA!!!!!
Y, claro, que vas a hacer, pues te pones a bailar… ¡Eso te lo hace un tío en el autobús y le partes la cara!
¡Pero como es Nochevieja…! ¡Pues ni modo!
Y de repente te das la vuelta y llevas cien personas enganchadas a tu espalda.
¡A ver como escapas de ésta!
Porque una conga es como una secta:
entrar es muy fácil pero salir es muy jodido.
Porque hay como doce congas girando a todos lados…
Bueno, pues iba yo conduciendo mi conga… por mi derecha, cuando, de pronto, me veo venir en dirección contraria una conga suicida
conducida por un gordo con casco de vikingo.
Yo le iba a hacer ráfagas, pero como las congas no llevan ni luces ni nada… pues, para evitar la colisión, di un giro brusco a la derecha…
¡Y me tragué entera una columna de espejitos!
¡Siniestro total!
Doce heridos leves y una columna de espejitos destrozada.
Y yo, con una ceja abierta tirado en el suelo pensaba: como me hagan soplar ahora, la.. y en ésas, me desmayé.
Al despertar estaba en la sala de urgencias, rodeado por todos los de mi conga.
Algunos todavía no se habían desenganchado; habían venido corriendo detrás de la ambulancia.
Bueno, las urgencias en Nochevieja, hay que vivirlas.
Si en la sala caben cincuenta personas, el dueño ha metido a ciento cincuenta…
Como el de la discoteca. Y como allí también es Nochevieja, el camillero lleva un gorrito de moro, la enfermera un collar de hawaiana y el que te cose la ceja unos dientes de Drácula ¡que te da una confianza… !
El tío te dice:
    -¿Qué ha sido? ¿Con una moto?
    -No, con una conga.
    -¡Ay!, si es que van como locos con las congas…
Cuando salís de allí...tienes unas ganas de matar el primero que te pregunte algo.. pero como era Nochevieja, acabé a las ocho de la mañana con la ceja engrapada y un dolor de cabeza que para que lo cuento..
Y eso es lo que yo le digo si no disfrutas en Nochevieja, ¿cuándo vas a disfrutar?

!!!!Feliz 2008 a todos!!!!!

P.D: ¡cuidado con las gongas..

avada kedavra

 

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